Terminada la liga regular y con el tercer puesto en la mano, los juveniles de la S.P. Ribereña se enfrentaban a su primera eliminatoria por el ascenso a la primera división regional de la categoría donde juegan. El partido de ida, jugado en Ribera, era muy esperado entre todos los ribereños. Y el ambiente se hizo notar en la tarde de ayer, con una romería de San Isidro de por medio, las gitarras y los bombos alegraban el graderío con ansias de una buena tarde de fútbol que se avecinaba.
El partido comenzó firme para los locales que salieron apretando arriba a su rival, Casar de Cáceres, que andaba un poco nervioso ante la expectación en los primeros minutos. Ese nerviosismo lo aprovechó el 10 local, Luis en un regalo de la zaga visitante para materializar el primer tanto para los ribereños, en el minuto 8 y que ponía aún más nerviosos a los de Casar de Cáceres sobre el césped ribereño. A partir de este gol, los chicos de Ribera desplegaron un buen fútbol sobre el césped natural, con un gran Samuel que repartía a todos sus compañeros, que subía y bajaba e iba controlando el partido en el medio campo. Suyos fueron tres goles, en los minutos 24, 50 y 74. También marcaron Abraham en el 29, Óscar en el 60. Seis goles que practicamente tranquilizan el partido de vuelta en la localidad cacereña. Buena tarde de fútbol que desplegaron estos chicos, además de tres balones al palo. El entrenador local, Toni hizo hasta 5 cambios, dando la entrada en el campo a varios cadetes. El conjunto visitante en todo momento se vió colapsado por los ribereños, aunque si dispusieron de varias ocasiones, que fueron bien paradas por José Carlos.
Ahora estos chavales viajarán a Casar de Cáceres para jugar el partido de vuelta y certificar su pase a la siguiente eliminatoria por un puesto en la primer división de juveniles de Extremadura.
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